Para volver a encontrarnos

Resulta imprescindible recuperar la memoria de lo ya visto, para cuando nos reencontremos en clase. En la misma, reordenaremos las fechas para lo que nos queda del semestre, se incluye la prueba. los invito a interiorizarse en la literatura realista para que podamos empezar a conversar.

Contexto histórico:

La vida social de fines del siglo XIX (España).

Realismo:

Realismo y Naturalismo:

La reacción contra el subjetivismo de los románticos desembocó en una literatura de características opuestas: EL REALISMO. El intimismo condujo a una visión falseada de la realidad; la imaginación liberada de trabas cayó en extravagancias y el alejamiento de un mundo concreto y circundante llevó a una evasión de los problemas vigentes en el siglo XIX. Por el contrario, ahora las condiciones socioeconómicas y las consecuencias morales que de ellas derivan, captan la atención de los escritores denominados realistas. La atracción es, por tanto, hacia un mundo cotidiano y los sucesos de la actualidad.

La literatura, en cuanto medio de expresión de sentimientos personales, de interiorizadas fantasías, de un yo sujeto y objeto de sus creaciones, va a ser superada por una literatura orientada hacia las cuestiones sociales y éticas del momento histórico que se vive.

La evolución del Realismo, junto a las influencias de las ideas positivas de Augusto Comte y del determinismo genético y ambiental de Hipólito Taine, desemboca en el Naturalismo. Este movimiento significa, antes que todo un realismo exagerado, intensificado que pretende ser manifestación de una realidad material concreta hasta en sus aspectos más sórdidos, morbosos y miserables. Es una literatura concebida como documento sociológico, sin pretensiones de elaboración artística.

Se hace necesario encontrar nuevos temas y recursos literarios por el agotamiento de las modalidades expresivas del periodo anterior. El hombre en su afán incesante de renovación y en una búsqueda permanente por encontrar el sentido último a su vida y a su mundo, se vuelca hacia nuevas posibilidades valorativas e interpretativas. Entonces el Realismo podría ser definido, en su forma más simple, como un movimento artístico que busca reproducir la realidad, sin pretender idealizarla o modificarla.

Por eso la literatura realista no es la expresión de una conciencia creadora, sino manifestación de un mundo concreto configurado del modo más objetivo e impersonal posible. Este afán de concreción histórica se traduce en una valoración del tiempo presente y del espacio actual, del aquí y el ahora, de lo circundante y lo circunstancial. Situación opuesta a la vivida por el Romanticismo, quien al no hacer realidad sus sueños y esperanzas, se refugiaba en su propia intimidad.

No obstante lo anterior, no podemos olvidar que el Realismo acoge ciertos elementos de índole costumbrista, como es la descripción de ambientes, hábitos y personajes característicos. Los autores realistas así pretenden entregar una visión total del hombre y de su realidad histórica, tanto en sus aspectos sublimes y altruistas como en los vulgares insignificantes y grotescos.